Iryna Stukanova, psicoterapeuta y pintora de Lysychansk, tras perder su hogar a causa de la ocupación rusa, no solo consiguió restaurar su propia vida, sino también seguir ayudando a los demás y desarrollando su arte, demostrando la capacidad humana de recuperarse de la pérdida y seguir adelante utilizando las habilidades profesionales y la creatividad.
Olha no considera a sí misma como desplazada interna o refugiada, aunque tiene suficiente experiencia en ello: su camino desde Luhansk a partir de 2014, cuando su ciudad de origen fue ocupada, ha sido rápido y largo a la vez, porque ¿cómo puedes olvidar tu hogar, borrarlo de tu biografía, de tu memoria? Sin embargo, Olha cree que se siente como en casa en cualquier lugar de Ucrania, y que la experiencia de los desplazados internos, de la que todos podríamos prescindir, ha revelado lo mejor de ella y de otras mujeres ucranianas.